Si el presente es de lucha, el futuro es nuestro" (Ernesto "Che" Guevara)+++++Ser joven y no ser revolucionario es una contradicción hasta biológica (Salvador Allende)+++++Por el engaño se nos ha dominado más que por la fuerza (Simón Bolívar)+++++El ejecutivo del Estado moderno no es otra cosa que un comité de administración de los negocios de la burguesía (Karl Marx)+++++La religión no es más que el reflejo fantástico de los poderes externos que dominan la existencia cotidiana (Friedrich Engels)+++++El viejo mundo se muere. El nuevo tarda en aparecer. Y en ese claroscuro surgen los monstruos (Antonio Gramsci)

martes, 13 de octubre de 2009

10 guerras, 10 mentiras mediáticas

Michel Collon

Traducido por Caty R.

1. Vietnam (1964-1975):

Mentira mediática: El 2 y el 3 de agosto Vietnam del Norte atacó a dos barcos estadounidenses en la bahía del Tonkin. Lo que supimos después: El ataque nunca existió. Fue una invención de la Casa Blanca. Objetivo real: Impedir la independencia de Vietnam y mantener la dominación estadounidense sobre la región. Consecuencias: Millones de víctimas, malformaciones genéticas (agente naranja), enormes problemas sociales.

2. Granada (1983):

Mentira mediática: Se acusa a la pequeña isla del Caribe de construir una base militar soviética y poner en peligro la vida de médicos estadounidenses. Lo que supimos después: Totalmente falso. El presidente Reagan fabricó el pretexto de cabo a rabo. Objetivo real: Impedir las reformas sociales y democráticas del Primer Ministro Bishop (que fue asesinado). Consecuencias: Represión brutal y restablecimiento de la influencia de Washington.

3. Panamá (1989):

Mentira mediática: La invasión tenía por objeto detener al presidente Noriega por tráfico de drogas. Lo que supimos después: Noriega era un producto de la CIA y reclamaba la soberanía del canal cuando acabase la concesión a USA. Intolerable para Estados Unidos. Objetivo real: Mantener el control estadounidense en esta vía de comunicación estratégica. Consecuencias: Los bombardeos estadounidenses mataron entre 2.000 y 4.000 civiles, ignorados por los medios de comunicación.

4. Iraq (1991):

Mentira mediática: Los Iraquíes habían robado las incubadoras de la maternidad de Kuwait City. Lo que supimos después: Invención total de una agencia publicitaria pagada por el emir de Kuwait, Hill & Knowlton. Objetivo real: Impedir que Oriente Próximo resista a Israel y consiga independizarse de EEUU. Consecuencias: Innumerables víctimas de la guerra y después un largo embargo incluso sobre los medicamentos.

5. Somalia (1993):

Mentira mediática: Kouchner «sale a escena» como héroe de una intervención humanitaria Lo que supimos después: Cuatro sociedades estadounidenses habían comprado la cuarta parte del subsuelo somalí, rico en petróleo. Objetivo real: Controlar una región militarmente estratégica Consecuencias: Al no conseguir controlarla, Estados Unidos mantendrá la región sumida en un caos interminable.

6. Bosnia (1992 - 1995):

Mentira mediática: La empresa estadounidense Ruder Finn y Bernard Kouchner ponen en escena supuestos campos serbios de exterminio. Lo que supimos después: Ruder Finn y Kouchner mentían. Eran campos de prisioneros para intercambios. El presidente musulmán Izetbegovic lo reconoció. Objetivo real: Romper Yugoslavia, demasiado a la izquierda, eliminar su sistema social, someter la zona a las multinacionales, y controlar el Danubio y las rutas estratégicas de los Balcanes. Consecuencias: Cuatro años de una guerra atroz para todas las nacionalidades (musulmanes, serbios, croatas), provocada por Berlín y prolongada por Washington.

7. Yugoslavia (1999):

Mentira mediática: Los serbios cometen un genocidio sobre los albaneses de Kosovo Lo que supimos después: Invención pura y simple de la OTAN, como reconoció Jamie Shea, su portavoz oficial. Objetivo real: Imponer la dominación de la OTAN sobre los Balcanes, y su transformación en policía del mundo. Instalación de una base militar estadounidense en Kosovo. Consecuencias: Dos mil víctimas de los bombardeos de la OTAN. Limpieza étnica de Kosovo por la UCK, protegida de la OTAN.

8. Afganistán (2001):

Mentira mediática: Bush pretende vengar el 11-S y capturar a Bin Laden Lo que supimos después: No hay ninguna prueba de que exista la red (Al Qaeda, N. de T.). En cualquier caso, los talibanes habían propuesto extraditar a Bin Laden. Objetivo real: Controlar militarmente el centro estratégico de Asia, construir un oleoducto que permitiera controlar el suministro energético del sur de Asia. Consecuencias: Una larga ocupación y un gran incremento de la producción y el tráfico de opio.

9. Iraq (2003):

Mentira mediática: Sadam poseía peligrosas armas de destrucción masiva, afirmó Colin Powell a la ONU, probeta en mano. Lo que supimos después: La Casa Blanca ordenó a sus servicios que falsificaran o fabricaran las pruebas (asunto Libby). Objetivo real: Controlar todo el petróleo y chantajear a sus rivales: Europa, Japón, China… Consecuencias: Iraq hundido en la crueldad, las mujeres relegadas a la sumisión y el oscurantismo.

10. Venezuela - Ecuador (2008-09):

Mentira mediática: Chávez apoya el terrorismo, importa armas, es un dictador (el pretexto definitivo parece que todavía no se ha elegido). Lo que ya sabemos: Ya se han vertido varias mentiras mediáticas: Chávez dispara contra su pueblo, Chávez es antisemita, Chávez es militarista… Y la satanización continúa. Objetivo real: Las multinacionales estadounidenses quieren el control del petróleo y los demás recursos de toda América Latina. Tienen miedo de la liberación social y democrática del continente. Consecuencias: Washington está librando una guerra global contra el continente: golpes de Estado, sabotajes económicos, chantajes, establecimiento de bases militares cerca de las riquezas naturales. En resumen, todas las guerras van precedidas y «justificadas» por una gran mentira mediática. ¡Y nuestro inventario está muy lejos de ser completo! Para impedir las guerras es imprescindible destapar estas mentiras mediáticas cuanto antes y de la forma más amplia posible. Gracias por difundir este texto y, si es posible, traducirlo y comunicarnos dichas traducciones ¡En la guerra de la información la verdadera fuerza es nuestra!